Por la fe, María penetró en el Misterio de Dios Uno y Trino como no le ha sido dado a ninguna criatura.
La Virgen es maestra de fe. Nuestra Madre nos enseña a estar totalmente abiertos al querer divino.
Su plena confianza en el DIOS fiel y en sus promesas no disminuye, aunque las palabras del Señor sean difíciles o aparentemente imposibles de acoger.
Por eso, si nuestra fe es débil, acudamos a María. Ella tiene sus brazos abiertos para acogernos. Su maternidad se extiende a todos nosotros. Conoce nuestra fragilidad humana y la dispersión que el mundo nos quiere hacer, si se lo permitimos.
Por eso la Iglesia constantemente nos invita a dirigirnos con particular devoción a María Santísima.
Les estaré comentando sobre la consagración al Corazón Inmaculado de María por San Luis María Grignion de Montfort.
CAMINA CON MARIA!!!.
A JESÚS POR MARÍA!!!.
EVANGELIO DE HOY
San Mateo, Capitulo 8, 28-34
SANTO DEL DÍA
S. AARÓN, HERMANO DE MOISÉS, SUMO SACERDOTE DEL ANTIGUO TESTAMENTO
San Junípero Serra
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