Jesús había anunciado a los suyos la inminencia de su Pasión y los sufrimientos que había de padecer a manos de los judíos y de los gentiles. Y los exhortó a que le siguieran por el camino de la cruz y del sacrificio (Mt 16, 24 ss).
Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, y los llevó a un monte alto, y se transfiguró ante ellos , de modo que su rostro se puso resplandeciente como el sol y sus vestidos blancos como la luz. En esto se le aparecieron Moisés y Elías hablando con Él (Mt 17, 1-3). Esta visión produjo en los Apóstoles una felicidad incontenible.
El misterio que celebramos no sólo fue un signo y anticipo de la glorificación de Cristo, sino también de la nuestra, pues, como nos enseña San Pablo, el Espíritu da testimonio junto con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.
Nuestro camino terrenal hacia el cielo, es una vía de cruz y sacrificio. Siempre estaremos luchando con todo lo que la vida nos depara. Pero si ponemos nuestras cruces a los pies de Jesús, todo será llevadero. Sera un dulce yugo.
Pidamos a Nuestra Señora que sepamos ofrecer con paz el dolor y la fatiga que cada día trae consigo, con el pensamiento puesto en Jesús, que nos acompaña en esta vida y que nos espera, glorioso al final del camino.
MI SEÑOR, te pido me transformes para amarte y adorarte como sólo tú mereces. Te pido me des todas tus ayudas celestiales, porqué sin ti no puedo. Dame el don de la perseverancia para que no decaiga mi fe, para sostenerme en mi camino hacia ti y llegar al Matrimonio Espiritual, a la meta que tú quieres que alcancemos.
CAMINA CON MARIA!!!.
A JESÚS POR MARÍA!!!.
EVANGELIO DE HOY
San Mateo 17 1-9
SANTO DEL DIA
S. ORMISDA, PAPA
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