MARÍA, MADRE NUESTRA

María por su obediencia se convirtió en la nueva Eva; además Madre de Jesucristo. 

Fue por el vientre de Nuestra Señora que se hizo posible el Plan de DIOS.

María recibió privilegios concedidos por DIOS cómo son: Concepción inmaculada, virginidad perpetua, maternidad divina y su Asunción en cuerpo y alma a los cielos.

La Virgen María ocupa en la redención el lugar de Corredentora de la Redención.  Fue obediente y colaboró con su fe a la reconciliación de los hombres con DIOS.

De ahí la gran importancia en nuestras vidas para CAMINAR CON MARÍA.  Bajo su protección y amparo.

Jesús mismo nos señaló al pie de la cruz a María como Madre (ver Jn. 19,27).

ORACIÓN DEL FIAT

Santa María,

ayúdame a esforzarme

según el máximo de mi capacidad

y el máximo de mis posibilidades

para así responder al Plan de DIOS

en todas las circunstancias

concretas de mi vida

Amén.

PRESENCIA DEL ESPÍRITU

Santa María,

Madre del Señor Jesús y nuestra

obtennos la presencia vivificante del Espíritu,

y la gracia de andar siempre

por los caminos de DIOS;

por tu bondadosa intercesión

consigue que estemos libres:

de las tristezas presentes,

de las asechanzas del enemigo,

de las flaquezas en la lucha,

de la permisividad

con nuestras inconsistencias;

y para cuando seamos

convocados por el Padre

consigue para nosotros

las alegrías sin fin.

Amén.

Siempre les recordare en este Blog, la importancia de mantenernos en la presencia de Nuestra Señora.  Ella nos espera con los brazos abiertos.  Con el amor y la ternura de una Madre, que jamás se cansa de insistir en que nos  acojamos a su maternal corazón y por ende al de su amado Hijo.

Mucha gente en éstos tiempos se siente con la necesidad de creer, aferrarse a algo.  De ahí el tesoro que llega a nuestra vida, conocer a Nuestra Señora y entender el lugar de preponderancia en el P!an Salvífico de DIOS.   Hay algo muy claro; para amar, hay que conocer .

Déjate amar por María!.  Camina con ella!.  Verás que sentirás que haz llegado a la verdadera paz y amor que sólo da una Madre.

A JESÚS POR MARÍA!.

SANTA MARÍA, RUEGA POR NOSOTROS!.